miércoles, 16 de julio de 2014

De como Julia me enseña siempre...

Julia estuvo internada.
Grave, muy.
Me llegaron a decir lo que ninguna madre debería escuchar nunca en su vida.

Pero aca estamos… ella demostrado fortaleza, nosotros aprendiendo.
En el Garrahan aprendes minuto a minuto. De enfermedades raras, de tratamientos irrisorios, de conversaciones en torno a la mateada con desconocidos a los que terminas queriendo. Y de tu propi@ hij@.
Julia, entubada, me hizo aferrar a la fe. Como hacia años no me pasaba. Me hizo rezar, suplicar, rogar. Y entender. Porque mientras conversaba con esa energía que yo llamo dios, hubo un momento que comprendí el por qué de la llegada de ella, con sus Síndromes a mi vida.
Cuando Julia nació yo sentía lástima por las discapacidades. Me generaban eso, tristeza, pesar, lástima. Nunca quise estudiar el Magisterio de “Especial” por eso, cómo se educa desde la pena? Imposible. Y ella llegó….
Pensaba, decía, mientras rezaba, que la razón por la que Julia llegó a mi vida es para hacerme conocer este mundo maravilloso,  para invitarme a descubrirlo, aceptarlo y hasta quererlo. Para permitirme conocer gente que nunca, jamás, hubiera conocido, gente absolutamente valiosa. Pero lo llamativo es que no sólo el mundo del sdDown y del sdWest descubrí, también me contacté con el mundo de las EPOF (las poco frecuentes), la ictiosis, los trasplantes (aprendí por ejemplo el valor que tiene la concientización sobre la donación PEDIATRICA de órganos), los tumores, las traqueos, las sondas, vías, catéteres, y etc. Varios…
Julia llegó para enseñarme las otras vidas que viven esas personas que no siempre somos nosotros, esos que salen en páginas web, o que son un amigo de un amigo… o el caso de la tele. Un caso de la tele mateaba conmigo en la casa Ronald McDonald del Hospital Garrahan… GUAU! Gracias Julia!
Y ahora, que pasó lo más grave del peligro, que la miro despatarrada en el cuna, que me mira y sonríe…  me surge otra pregunta, más profunda, más íntima… Cómo sería Julia, si no fuera como es Julia?...
Y  "charlando con el quia" me respondo que, afortunadamente, eso no lo sabré nunca…

Gracias, desde aca, a todos, y cada uno de Uds que nos acompañaron tanto a los 3. Gracias con el alma. Y con el alma recuperada de Julia también!